Hablando Politicamente desde Xalapa

Por Catemaco anda queriendo "regresar" un delincuente

Jorge Alberto González Azamar con dos negros pasados

Y cómo fue que pudo negociar 2 consecutivos peculados

Alguien que sabe mucho de sus transas es Loyo Ramos

Ahora viene por una tercera, la de 4 años; tirando rollos

Pero no superará la prueba del nuevo PRI de Peña Nieto

Jorge Alberto Velasco Uscanga

XALAPA-ENRÍQUEZ, Ver.- Desde 1992 hasta 2010 y como alcaldes, se han repartido el pastel municipal de Catemaco entre Jorge González Azamar 1992-1994 y 2008-2010, Tomás Montoya Pereira 1995-1997, Sergio A. Cadena Martínez  1998-2000 y 2005-2007 y de ellos como presidentes municipales fue de quienes más se habló del corrupto tema malversación de recursos públicos y si hablamos de ajustes de cuentas: Sergio Cadena pisó la cárcel aunque por muy corto tiempo y Jorge González Azamar la ha librado de ser juzgado por instituciones judiciales, pero no de ser condenado y rechazado por su propio pueblo lo que poco le interesa.

Pero hay una anécdota que a Jorge González Azamar nunca se le va a olvidar, creemos,  fue en el último año del primer periodo constitucional del trienio 1992-1994, cuando desesperado por la auditoria ordenada por la LVI Legislatura Local que tenía como presidente de la Permanente a Francisco Javier Loyo Ramos que transmitió la orden a Jesús Zurita Romano Jefe de Auditoria para que la aplicara a ese Ayuntamiento de Catemaco el año 1994 pues había muchas denuncias por las corruptelas del alcalde y para los cual se comisionó al Contador Público Auditor Lucio Delfín que llegó a lo suyo y fue en el despacho de González Azamar que Delfín le comunicó que había encontrado elementos suficientes para proceder en su contra, por ladrón; ofreciéndole a Delfín que por una buena cantidad de dinero que le entregaría lo liberara del problema en que se encontraba; a Delfín interesó el "negocio" y acordaron la cantidad para borrar las huellas del delito.

Pero ahora, les voy a contar en que consistió la ayuda del Auditor al hampón.

Lucio Delfín tomó todas la facturas de gastos y recibos por ingresos y los lanzó al aire cayendo todos los documentos en desorden al suelo y Azamar González quedó todo contrariado y preguntó a Delfín  por qué hacia eso y éste presto le contestó; el desfalco ha quedado subsanado, pues al llegar a Xalapa le comentaría a su jefe Zurita Romano que la auditoria no había podido ejecutarse debido al desorden en el que se encontraba la documentación oficial y eso le daría tiempo para que cabildeara con el Diputado Loyo Ramos y el Contador Blas Freire jefe de Glosa de esa LVI Legislatura; cosa que hizo muy bien González Azamar y salió bien librado porque del mismo cuero catemaqueño salieron las correas para amarrar y tapar el peculado.

Pero en su segundo periodo en el que fue por más, el 2008-2010, nuevamente incurrió en otro millonario quebranto a las arcas municipales, por lo que investigado y encontrado culpable la autoridad judicial obsequió la orden de presentación por abuso de autoridad e incumplimiento de un deber legal bajo la causa penal 277/2010,: esto, ya bajo las ordenes de la actual LXII Legislatura donde aparece nuevamente Francisco Javier Loyo Ramos, pero ahora como Secretario General del Congreso Estatal y otra vez Jorge González Azamar, salió exonerado de caer a la cárcel por abuso de autoridad y otros delitos.

Vidas paralelas para la transa, las de Loyo Ramos y González Azamar.

Pero hay más sobre las tropelías de este corrupto  catemaqueño, que sabe moverse muy bien en el bajo mundo de los sobornos y así como esas dos "hazañas" ha cometido otras tantas de las cuales encontró como salir, ilegalmente.

Por lo que cabría hacer esta pregunta:

¿Será que Catemaco quiera nuevamente a González Azamar para que dirija los destinos de ese Pueblo Mágico ahora por un cuatrienio?

La respuesta queda en el aire, pues este personaje ya se anda promoviendo diciendo que lleva el consentimiento del que manda en Veracruz y que su llegada como candidato ya fue negociada en el PRI de Erick Lagos, porque es un pago de facturas. Lo que nadie le cree pero eso cuenta a quienes quieran escuchar sus trasnochados rollos.

Así es que y suponiendo sin conceder que otra vez Loyo Ramos lo apuntale, probablemente ahí no se cumpliría entonces la sentencia que en su visita al puerto de Veracruz el pasado 6 de enero lanzó el Presidente Nacional del PRI César Camacho Quiroz; al descartar que los próximos candidatos del PRI vayan a ser imposiciones del centro como antaño con los gobiernos priistas o que se den imposiciones locales puesto que tomarán en cuenta que los candidatos tengan aceptación y sin malos antecedentes; esto es, el nuevo PRI de Enrique Peña Nieto y de Javier Duarte de Ochoa donde negativos priistas como González Azamar no pasarían la más mínima prueba de honradez. Y solo por hoy, aquí le paramos.

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